Los dientes se deben cepillar después de cada comida (unas 3 veces al día) y sin dejar pasar mucho tiempo (no más de 15 min) tras la misma. Cuantos más ácidos sean los alimentos ingeridos, más se aconseja retrasar el cepillado (incluso hasta la media hora tras la comida). Para que sea efectivo, es importante que la técnica sea correcta y que el cepillo esté en buen estado.
PREVENCIÓN
Deberíamos dividir la boca en 4 partes para no descuidar ninguna zona. El cepillado debería realizarse en seco (no mojar el cepillo) y con una cantidad de dentífrico similar al tamaño de un guisante.
La clave es la técnica pues de nada vale cepillarse los dientes mal y emplear el tiempo necesario (2,5 -3 minutos):
- Coge el cepillo y colócalo de manera horizontal con respecto a la línea de la encía, formando un ángulo de 45 grados. Realiza pequeños movimientos suaves de manera horizontal, siempre de encía a diente, incidiendo en el surco gingival.

- Una vez has realizado la limpieza de todas las caras vestibulares –visibles o externas– de los dientes, continúa con la limpieza de la cara interna de los mismos. Para ello, coloca el cepillo de igual manera, formando un ángulo de 45 grados, y repite esta secuencia de movimientos por la cara interior de las piezas dentales. En la zona anterior de la boca el cepillo se pondrá en posición vertical.

- Las caras de masticación se limpian con movimientos cortos horizontales de delante atrás.

- Por último, deberíamos cepillarnos la lengua con movimientos suaves de atrás hacia delante.
- No olvidar que la limpieza de boca no acaba aquí, pues debemos luego eliminar la placa entre los dientes mediante el hilo dental o los cepillos interdentales por ejemplo.
Pon el cepillo sobre las piezas dentales, ejerciendo un poco de presión y muévelo realizando movimientos circularesdesde la encía el diente, inclinando levemente el cabezal para acceder a las áreas interdentales. El propio movimiento del cabezal del cepillo dental eléctrico, hará el resto del trabajo mediante movimientos de vibración y/o rotación. Una vez limpias las caras externas e internas de los dientes, repasaremos las zonas de masticación y por último la lengua.
La técnica es similar a la del cepillado manual y los pacientes se acostumbran rápidamente.
Cada dentífrico tiene un uso determinado según los problemas que se observen en cada paciente. Así, algunos son especiales para encías o para hipersensibilidad dental, con mayor concentración de flúor para remineralizar el esmalte y para la prevención de caries… El paciente siempre debe preguntar a su dentista cuál es el dentífrico más adecuado para él.
Los colutorios son coadyuvantes del cepillado, nunca deben usarse como sustitutos. Aportan una mayor higiene a nivel desinfectante además de mejorar la salud de las encías. También aportan un mayor frescor de boca.
La seda dental se usa para eliminar esos restos de comida entre los dientes que con un cepillo dental no es posible retirar. Es necesario que el dentista explique la manera correcta de hacerlo para no lesionar la encía.
Los cepillos interdentales se usan igual que la seda dental, pero en pacientes periodontales, ya que éstos tienen unas troneras (espacios entre dientes) mayores que un paciente sano y la seda dental no ¨barre¨ todo lo necesario
- Cepillando tras las comidas y usando una pasta y colutorio especial para encías. No olvidar el empleo del hilo dental o de los cepillos interdentales y sobre todo el empleo del irrigador dental. link a higiene
- Acudiendo a revisiones regulares al dentista y haciendo limpiezas periódicas profesionales.
- No fumar o en su defecto reducir el tabaco, emplear férula de descarga para evitar el bruxismo en caso de existir, tener una dieta y vida equilibrada…
El sangrado de las encías puede provocar mal aliento, mal sabor, y derivar en una inflamación severa, gingivitis o periodontitis, que si no es tratada puede provocar una pérdida de encía, incluso del hueso que soporta los dientes.
Las causas pueden ser varias, genética, mala higiene, acumulación de sarro… Todas ellas tienen solución. Nuestro consejo es visitarnos en nuestra clínica dental en Palma para una revisión donde valoraremos los motivos del sangrado y te ofreceremos la solución más natural y eficiente.
Si no se trata, posiblemente, acaben cayendo. Esto es debido a una gran pérdida ósea alrededor del diente, consecuencia de la periodontitis, acumulación de sarro debajo de la encía. En seguida que perciba el movimiento, debe visitarnos, según el grado de movimiento, hay diferentes soluciones. Cuanto antes lo detectemos, más sencilla será la solución.